Epilepsia: síntomas, diagnóstico y tratamiento. Día Internacional Epilepsia
(Madrid. Lucila Rodríguez)
Alrededor de 50 millones de personas padecen epilepsia en todo el mundo (400.000 en España), lo que convierte a esta enfermedad cerebral en uno de los trastornos neurológicos más comunes que existen. Sin embargo, y a pesar de ser tan antigua como la humanidad, todavía no se ha encontrado la cura.
Los síntomas más característicos de la epilepsia son las convulsiones recurrentes, crisis causadas por descargas anormales de actividad eléctrica neuronal que impiden el control normal de diferentes funciones cerebrales como la memoria, conciencia, atención, sensibilidad, vista, gusto, movimiento, olfato o función visceral.
Estos episodios suelen durar unos segundos, máximo unos minutos, pero para poder hablar de crisis epilépticas se tiene que haber sufrido, al menos, dos no provocadas en menos de 24 horas; tener, tras la aparición de estas dos, una crisis no provocada y una probabilidad de presentar otra durante los próximos 10 años similar al riesgo general de recurrencia; y recibir un diagnóstico de un síndrome epiléptico.
“Las epilepsias suelen ser leves, se controlan con la medicación o remiten pasado un tiempo. La mayoría precisan tratamiento farmacológico, pero algunas, como las focales autolimitadas de la infancia suelen evolucionar bien sin necesidad de medicación”, explica la Dra. Irene García Morales, neuróloga y médico de la Unidad de Epilepsia del Hospital Ruber Internacional.
Precisamente en la Unidad, liderada por el doctor Antonio Gil-Nagel, se presta especial atención al diagnóstico de la epilepsia porque puede condicionar la evolución de la enfermedad. Para ello se realiza una entrevista clínica que ayuda a orientar el proceso diagnóstico de una manera individualizada, así como una resonancia cerebral, la monitorización vídeo EEG prolongada, o un estudio genético.
Además, el centro es pionero en el uso de la técnica ESI, la cual consiste en la implantación de más de 72 electrodos de superficie en pacientes ingresados durante una semana para conocer de forma precisa la localización de la zona cerebral donde se originan las crisis epilépticas.
Tratamiento de la epilepsia
Una vez diagnosticada, la epilepsia se puede tratar de forma quirúrgica o farmacológica. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que con una pauta adecuada de medicamentos anticonvulsionantes hasta un 70% de las personas con epilepsia podrían vivir sin crisis.
No obstante, en ocasiones sí es necesario recurrir a la cirugía. “La Unidad de Epilepsia del Hospital Ruber Internacional es un centro de referencia en el tratamiento quirúrgico de epilepsias farmacorresistentes de difícil localización y, además, es pionera en el uso de la estéreo-electroencefalografía, una técnica neurofisiológica que consiste en la implantación de electrodos profundos intracerebrales para localizar la zona que genera las crisis”, detalla el Dr. Rafael Toledano, neurólogo y médico adjunto de la citada unidad.
Estos procedimientos logran mejorar la vida de los pacientes, si bien y pese a los avances diagnósticos y terapéuticos es necesario seguir incentivando y promoviendo la investigación de nuevos mecanismos de acción para controlar las crisis, modificar el curso de la enfermedad y, lo más importante, lograr su cura.