El, Dr. Gil-Nagel, Director del Programa de Epilepsia, nos explica a continuación como se debe actuar ante una crisis. Existen muchas ideas erróneas de que se debe hacer, algunas de ellas muy perjudiciales.

Siguiendo las indicaciones del actuaremos correctamente.

Actitud correcta al presenciar una crisis:

Cuando una persona presencia una crisis epiléptica suele experimentar una impresión muy intensa, acompañada de miedo y preocupación por el enfermo, mientras que puede pensar que el afectado está a punto de morir. Sin embargo la gran mayoría de las crisis epilépticas no son graves, cesan por sí mismas en uno o dos minutos, y no dejan secuelas. Actuar correctamente al presenciar una crisis es importante, porque aunque no es mucho lo que podemos hacer para ayudar al enfermo, las actuaciones inadecuadas pueden provocar daño y puede ser peor que las crisis en sí. A continuación se recoge en una lista de lo que debemos y lo que no debemos hacer para ayudar a una persona durante una crisis epiléptica.

Sí se debe hacer:

  1. Mantener la calma: La persona se recuperará por completo en unos minutos después de la crisis. Si su respiración está interrumpida se reanudará en poco tiempo.
  2. Evitar golpes y otros peligros. Nunca sujetarle o interferir en sus movimientos, excepto para evitar la caída brusca. Apartar objetos con los que se pueda golpear, aflojar la ropa demasiado apretada. Si camina sin rumbo o está agitado no restringirle salvo que se dirija hacia una zona de peligro.
  3. Dirigirse al paciente con un lenguaje calmado, no amenazante.
  4. Tumbar sobre un costado. Después de una crisis generalizada tónico clónica, cuando ya han cesado las convulsiones y el paciente está somnoliento, es aconsejable tumbarle de lado, sobre un costado. De esta forma si se produce un vómito éste no pasará a sus pulmones.
  5. Ayudar al enfermo a respirar. Es importante asegurarse de que las vías respiratorias – nariz y boca – estén despejadas. Esto se consigue colocando al paciente sobre un costado. No es necesario practicar la resucitación cardiorrespiratoria cuando el diagnóstico de crisis epiléptica es claro.
  6. Observar. Atender a lo que ocurre durante la crisis, con vistas a relatarlo al médico, será la clave para un buen diagnóstico y por tanto para un adecuado tratamiento.

 

No se debe:

  1. Forzar la apertura de la boca o introducir objetos en ella. Es una creencia extendida y que puede acarrear graves consecuencias. Si en una crisis la mandíbula se contrae y se muerde la lengua esto ocurre de forma inmediata, cuando nosotros actuamos ya es tarde y no podemos evitarlo. Tratar de abrir la boca del enfermo o introducirle objetos en ella puede causarle lesiones en los dientes y la articulación temporo-mandibular. Colocar objetos en la boca además puede provocar asfixia si éstos se desplazan hacia la garganta.
  2. Interferir en sus movimientos. Tratar de reprimir las convulsionesdurante la crisis es contraproducente. Sacudir al enfermo o echarle agua en la cara no tiene ninguna utilidad.
  3. Administrar alimentos o medicamentos por la boca. Durante una crisis se alteran los mecanismos de deglución, por lo que la administración de medicamentos o alimentos puede provocar atragantamiento. En ocasiones el médico recomendará administrar algún medicamento en caso de crisis para prevenir crisis posteriores. Estos medicamentos pueden administrarse por vía sublingual, nasal o rectal.

 

En resumen, ante una crisis …

  1. Mantenga la calma.
  2. No es necesario realizar respiración artificial.
  3. Forzar la apertura de la boca es contraproducente.
  4. Evite que se haga daño.
  5. Ayúdele a respirar.
  6. No interfiera en sus movimientos.
  7. Observe atentamente todo lo que ocurre durante la crisis.
  8. Espere pacientemente a que termine la crisis.
  9. No le administre medicamentos por la boca.
  10. Pasada la crisis no se necesita ningún sedante.
  11. Valorar si se debe llamar a una ambulancia.

 

¿Cuándo se debe avisar a una ambulancia?

Generalmente no es necesario llamar a una ambulancia o acudir a urgencias, pero sí debe hacerse en las siguientes situaciones:

  1. Cuando es la primera crisis que tiene esta persona.
  2. Cuando es la primera crisis de este tipo que tiene esta persona, aunque su epilepsia nos fuera conocida.
  3. Cuando es un enfermo con epilepsia que no está tomando su medicación.
  4. Cuando ocurre durante un proceso infeccioso o que se acompaña de fiebre.
  5. Si se ha producido lesión durante la crisis.
  6. Si se tiene una crisis detrás de otra, sin recuperación de la conciencia entre ellas.
  7. Cuando, después de un minuto de finalizada la crisis el enfermo no ha comenzado a respirar. En este caso debe llamarse a una ambulancia y realizar la respiración asistida pues puede tratarse de un problema cardiaco y no una crisis epiléptica.
  8. Si el enfermo solicita asistencia médica urgente.
  9. Si la crisis dura más de quince minutos

 

Siguiendo estas indicaciones actuaremos correctamente ante una crisis epiléptica.